viernes, 4 de septiembre de 2015

PALEONTOLOGIA

Puse "stop". La imagen se detuvo. Se congeló en un fotograma.  Era el segundo plano de un documental enviado a la selección de un festival del que yo hacía parte del comité de selección.  No tenía aun ningún criterio para determinar si haría parte de las películas escogidas. Simplemente puse "stop". Acaté una orden. Recibí un mensaje repentino de escribir. Escribí:

No imaginó el dinosaurio
Que millones de años después
Un viejo flaco sabio y testarudo
Obsesionado con el flujo de su sangre
Escarbaría en el lodo
Pedacitos de  huesos fracturados
Y que uniéndolos con una goma transparente
Reconstruiría un trozo de esqueleto
Sobre el cual diseñaría una masa muscular
Una piel una mirada un gesto
Una acción veloz en busca de su presa
Una danza de amor y un gran gemido
Para seducir a su hembra
Entre  un bosque de helechos melenudos
Al arrullo de cascadas y tormentas
Erupciones volcánicas
Y voces indescifrables
De dioses infantiles que jugaban con el fango
Tratando de inventar figuras
Que algún día volverían
A esculcar el mismo lodo
Intentando extraer de sus  entrañas
Los restos fragmentados del esqueleto
De un dinosaurio que sin lugar a dudas
Tendría que  ser él mismo.

Diego García Moreno

Bogotá agosto 29 de 2015
He sido un cultivador de cartas... pero se extinguen los huertos, las postales, los destinos. Busco materos, balcones, ventanas, lienzos libres donde pueda sembrar mis dudas, mis palabras, las cascadas de imagen que a veces se me ocurren. Dale hombre, me han dicho algunas fieles amistades, invéntate un blog, escribe. Ya verás que es un buen andén para compartir tu risa, tu silencio, tus desdichas. Curioso, dócil, ingenuo, acepto jugar a lo impreciso.