Durante tres años mi vida fue parcialmente feliz:
mi hermana se enamoró de Ramón Hoyos
y yo a escondidas dejaba abierta la ventana
para que él viniera una noche
y se la pudiera robar tranquilamente
pero un día ella llegó malencarada
no buscó la foto de su amor en la página de deportes
ni opinó nada
cuando papá nos dijo en el almuerzo
que el campeón se había casado
mi hermana tendría diez años
mi hermana naufragó quince noches en rancheras
mi hermana nunca se enteró de que en mis sueños
un niño Dios me había regalado una cicla
y que en la recta final le sacaba media rueda
a un Ramón Hoyos disminuido
por tantos amores que había traicionado
Diego García Moreno - París 1979.
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